Tengo miedo. La tarde es gris y la tristeza
del cielo se abre como una boca de muerto.
Tiene mi corazón un llanto de princesa
olvidada en el fondo de un palacio desierto.
Tengo miedo. Y me siento tan cansado y pequeño
que reflejo la tarde sin meditar en ella.
En mi cabeza enferma no ha de caber un sueño
así como en el cielo no ha cabido una estrella.
Sin embargo en mis ojos una pregunta existe
y hay un grito que mi boca no grita.
¡No hay oido en la tierra que oiga mi queja triste!
abandonada en el medio de la tierra infinita..."
Pablo Neruda (Chile 1904-1973)